viernes, 14 de septiembre de 2018

La Ilustración


Leía estos días, con fruición, ese magnífico libro de Editorial Akal titulado El libro de la Historia y que forma parte de una colección que remite también a la filosofía, arte, religión ciencia, etc.
Estando en la parte que corresponde a los enciclopedistas y que dio lugar a la Ilustración, el texto, como es natural, ponderaba la gran importancia que tuvo en el mundo. El primer volumen de la Enciclopedia se publicó en 1751, y la obra, completada 21 años después, consistió en 17 volúmenes de texto y 11 de ilustraciones. Los textos y artículos de la obra destilaban los pensamientos de escritores y filósofos como Montesquieu, Rousseau, Voltaire, D´Alambert y el citado Diderot. La Ilustración cambió la visión del mundo y el  orden social e influyó de forma decisiva en la futura evolución de Occidente. La Constitución de EE.UU. tiene como base esa afirmación –subversiva en ese momento- de que  “todos los hombres son creados iguales” y que los gobiernos debían ser consecuencia del “consentimiento de los gobernados” como propugnó Thomas Jefferson. El mundo moderno tuvo su origen en ese primer volumen de 1751.
Doscientos años más tarde hubo otro acontecimiento de verdadera importancia, al menos para mí, que fue mi nacimiento. Y unos trece o catorce años después, durante el bachillerato y en el Colegio de los Escolapios, me enseñaban sobre los enciclopedistas que eran “filósofos malditos” de ideas subversivas y enemigos de la Iglesia. Sus obras y enseñanzas no eran lecturas recomendables cuando no muy peligrosas. De Voltaire, Rousseau, Diderot y D´Alambert, -recuerdo perfectamente el orden del libro de texto- había que huir como de la peste.
Y como decía Labordeta… “así nací, así viví y así crecí.
Con mucho esfuerzo y a pesar de ellos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario